19 de agosto de 2010

Verano y literatura VIII

LA CALLE PANDROSSOU


Bienamadas imágenes de Atenas.

En el barrio de Plaka,
junto a Monastiraki,
una calle vulgar con muchas tiendas.

Si alguno que me quiere
alguna vez va a Grecia
y pasa por allí, sobre todo en verano,
que me encomiende a ella.

Era un lunes de agosto
después de un año atroz, recién llegado.
Me acuerdo que de pronto amé la vida,
porque la calle olía
a cocina y a cuero de zapatos.

Jaime Gil de Biedma, Las personas del verbo

2 comentarios:

chose dijo...

La última frase explicaría, para mí, la magia evocadora de la escritura-lectura.

Me está engatusando esta serie.

discreto lector dijo...

Sí, Chose, los sentidos nos conducen a la lectura y la escritura, del mismo modo que leer y escribir nos evocan las experiencias sensuales de la vida: los olores, los sonidos, los sabores... Vida y libros unidos una vez más.

Me hace feliz saber que estás engatusada. Ése era el objetivo de estas entradas.